La Policía Federal de Brasil imputó este jueves al expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022) en el caso en el que es investigado por el supuesto intento de apropiación indebida de joyas millonarias que le fueron regaladas por países árabes cuando aún se desempeñaba como jefe de Estado de Brasil.
Los investigadores acusaron a doce personas, incluido el líder de extrema derecha, de los delitos de apropiación de bienes públicos, lavado de activos y asociación para delinquir, Según confirmaron a Efe fuentes oficiales.
Los abogados del capitán de la reserva, que siempre han negado los cargos y argumentaron que las joyas siguen en posesión de la Presidencia, declinaron hacer comentarios sobre el resultado de la investigación.
El informe policial será enviado al juez del Tribunal Supremo encargado de la investigación, Alexandre de Moraes, quien lo enviará a la Fiscalía para determinar si hay pruebas suficientes para procesar al acusado y si solicita al Tribunal la apertura del juicio respectivo.
La policía presentó cargos de asociación delictiva contra doce personas investigadas, entre ellas el exministro de Minas y Energía Bento Albuquerque y el entonces asesor de Bolsonaro, Mauro Cid; cargos de malversación de fondos contra siete; y cargos de lavado de dinero contra nueve.
El caso se refiere a una colección de joyas y objetos valiosos que el líder ultraderechista recibió en viajes oficiales a Arabia Saudí y otros países árabes y que debería haber entregado al tesoro estatal al dejar el cargo.
Según las investigaciones, Bolsonaro vendió algunas de estas joyas a través de intermediarios, aunque algunos de sus colaboradores las recompraron una vez que el Estado exigió su devolución.
Entre los acusados se encuentra el abogado Frederick Wassef, defensor del expresidente, quien, según la investigación, viajó a Estados Unidos para recomprar las joyas después de que el Estado exigiera su devoluciónen enero del año pasado, cuando el progresista Luiz Inácio Lula da Silva asumió el poder.
En marzo pasado, Bolsonaro también fue acusado de asociación delictiva y uso de datos falsos en registros oficiales, en el caso en el que se le investiga por presunto fraude en la obtención de un certificado de vacunación contra la COVID-19.
En ambos casos las confesiones de Mauro Ciddetenido en mayo de 2023 y que ahora se encuentra en libertad provisional tras firmar un acuerdo con las autoridades en el que se comprometió a confesar sus crímenes y aportar pruebas contra sus cómplices a cambio de beneficios judiciales.
Una tercera investigación contra Bolsonaro por parte de la Policía Federal que está en fase avanzada, y la más grave, es la que lo coloca en el centro de la trama golpista que buscaba anular la victoria electoral de Lula en octubre de 2022 y mantener al líder ultraderechista en el poder.
El intento de golpe tuvo un capítulo final el 8 de enero de 2023, cuando miles de partidarios del líder ultraderechista invadieron y destruyeron las sedes de la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema con la idea de forzar una intervención militar para derrocar al gobierno de Lula.
Además de las investigaciones penales, el expresidente también está en la mira de la justicia electoral, que en dos de los casos ya lo despojó de sus derechos políticos durante ocho años por abusos de poder político y económico en los que incurrió durante la campaña para los comicios en los que fue derrotado en 2022.
